Este viernes 25 de mayo de 2012, el
mundo fue estremecido por la noticia de la Masacre de Hula, un pequeño poblado
ubicado en el centro de Siria. En dicha masacre murieron asesinadas 108
personas, de las cuales 49 fueron niños y 34 fueron mujeres. Inmediatamente
surgió la condena automática hacia el Gobierno Sirio, quien fue categóricamente
culpado de la responsabilidad de dicha Masacre.
Sin embargo, revisando con
cuidado lo que se puede filtrar de la prensa internacional, descubrimos las
siguientes declaraciones. El embajador adjunto de Rusia ante las Naciones
Unidas declaró este lunes 28 que … “No
descartamos la posibilidad de que la masacre de Hula fuera una medida de
provocación”. Basam Abu Abdolá, experto
politólogo sirio indicó este domingo 27 que 'EEUU planeó y comandó la matanza
de Hula'. Por su parte, el propio Gobierno Sirio, de boca de su embajador ante
la ONU, Bashar Jafari, señaló que "La masacre de Hula es un crimen
injustificable. Ha sido condenada por mi Gobierno". Este martes 29 el
ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, declaró que la oposición siria busca la intervención
militar extranjera y la incitación a una guerra civil. Para atizar las
tensiones, la BBC de Londres, publicó una foto falsa de la Masacre en su portal
el día de la misma, esta foto había sido tomada durante la invasión
norteamericana a Irak, en el año 2003.
Como se puede observar, más allá de las culpabilidades automáticas lanzadas
por los EEUU y los Gobiernos de Inglaterra y Francia, hay serias dudas de que
la versión que nos cuentan los medios internacionales sea la verdadera. Ya
tenemos la experiencia de las “armas de destrucción masiva”, inventadas por los
ingleses y los gringos con la finalidad de fabricar una excusa medianamente
creíble que les permitiera invadir. ¿No puede estar sucediendo lo mismo en el
caso de Siria? El Gobierno Sirio ha clamado por el cese del armamento de los
grupos irregulares que operan en su territorio, repitiendo el guión de Libia,
en donde un grupo de mercenarios fue armado las potencias extranjeras para
subvertir el orden, desestabilizar y provocar la invasión por parte de la OTAN,
de los gringos, o de las fuerzas de paz de la ONU (total, son como la misma
cosa…).
Es urgente que los Gobiernos verdaderamente independientes, autónomos y
libres soliciten a las Naciones Unidas una investigación imparcial de los
hechos, que se castigue a los culpables y que cese el intervencionismo contra
la hermana República de Siria.